Reiki – Terapias de relajación
Reiki
El Reiki es una terapia milenaria estudiada por la OMS (Organización Mundial de la Salud). Esta terapia se basa en la imposición de las manos en puntos específicos del cuerpo (denominados chakras) para alinear cuerpo y mente y que este se mantenga en un estado de equilibrio.
Se realizará vestido y descalzado, el paciente obtendrá durante la sesión un estado de relajación mediante la técnica ejercida, acompañada de música suave y aromaterapia.
La finalidad de las sesiones será encontrar el equilibrio mental y emocional del paciente, la sesión tendrá una duración total de entre treinta a cincuenta minutos máximo.
Son muchas las personas que acuden, por primera vez, a nuestro centro y que coinciden en los resultados inmediatos al realizar esta terapia de relajación que ayuda a disminuir los estados de nerviosismo y relajarse: “No le doy tantas vueltas a la cabeza”, “Me encuentro mucho más relajado en todos los aspectos”.
Gracias a mi experiencia como terapeuta nivel maestría, he podido constatar que gran parte de las dolencias o patologías de hoy en día tienen un origen emocional interno, capaz de ayudar en su recuperación corrigiendo nuestro estado emocional.
Los efectos del Reiki producen, por lo general, una armonización completa del ser humano. Esta práctica estimula y despierta las fuerzas internas de cada persona, equilibra sus centros energéticos y mejora las funciones metabólicas del cuerpo.
Un masaje aplicado sobre la musculatura provoca vasodilatación, gracias a la cual recibirá un excelente aporte sanguíneo, que acelerará los procesos endomusculares manifestándose oxigenación y nutrición de fibras musculares, eliminación de toxinas y otras reacciones químicas.
- Sobre tendones y ligamentos, la aplicación de un masaje conseguirá drenar la vaina tendinosa y evitar adherencias de los tejidos en tendones y ligamentos dándoles mayor movilidad.
- Sobre el sistema linfático, el efecto de una masaje puede ser drenante para eliminar líquido retenido.
- El masaje aplicado en la piel arrastra las células muertas elimina las toxinas, promoviendo la función de transpiración y evitando la formación de posibles alteraciones, como quistes e infecciones.
- Sobre el tejido óseo, el masaje aumenta la nutrición del hueso favoreciendo el metabolismo óseo, evita adherencias al mismo y da mayor movilidad.
- Gracias a un masaje continuado sobre las articulaciones se puede llegar a eliminar adherencias en esta al favorecer la circulación y movilización.
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